A partir del momento en que la búsqueda es exclusivamente el encontrar,
las palabras podrían ser una línea de sonidos y su ausencia,
las voces un puñado de segundos y simultáneamente,
las habitaciones sin tiempo.
Los silencios, las conexiones imprecisas de imágenes.
Los objetivos, tan solo proyecciones.
El rabillo de un ojo, una sonrisa.
Las diferencias, el respeto absoluto.
Todas las personas del mundo, un solo elemento.